La DAFO y las familias

Si aplicamos el análisis DAFO a las familias podemos obtener resultados muy curiosos, tanto desde el punto de vista axiológico, como desde el punto de vista analítico.

DEBILIDADES: En la conducta de las personas existe un valor intrínseco, tanto en su bondad, como en su maldad, que le afecta en las relaciones con los demás, ya sean personas de su entorno social, o bien personas de su propia familia. Los factores más negativos de dicha conducta, tales como reacciones violentas, falta de voluntad de acción, pasividad ante los conflictos, rechazo de cierta autoridad familiar y social, desapego al orden establecido, provocan una DEBILIDAD en la adquisición de su socialización, a lo largo de su infancia y posterior entrada en la adultez.

En las madres sobre todo se puede apreciar como un elemento causante o motivador de su inestabilidad personal futura, falta de autoestima, poco autocontrol ante los conflictos, alta intolerancia a la frustración, facilidad de angustia ante los problemas, poca capacidad de superar las dificultades, etc.

En los padres, también genera inestabilidad personal futura, pero sobre todo genera violencia social, propicia el caer en el consumo de drogas y la delincuencia. Suelen ser padres permisivos ante conductas desajustadas de sus hijos e hijas y negligentes en la imposición de normas.

Tanto; padres, como madres que han sido envueltos por la debilidad, terminan criando a sus hijos sin las habilidades necesarias, para transmitir normas y conductas adecuadas en su desarrollo social. Así como para ser conscientes a tiempo de lo que tienen entre manos, resultando en muchos casos que cuando se dan cuenta los menores cuentan con edades muy conflictivas de actuar.

FORTALEZA

Una de las principales fortalezas internas es la voluntad, junto a la capacidad de actuar afectivamente frente a las diferentes situaciones que se pueden plantear en las relaciones que se producen en el entorno familiar y social.

Ésta ayuda a la persona a afrontar dificultades, a sobreponerse a los contratiempos que surgen en los conflictos interpersonales y sobre todo a superar las adversidades vitales que siempre acechan a las personas.

AMENAZAS

Las amenazas siempre vienen de fuera. Por qué los pueblos fortificaban su exterior, para evitar las amenazantes acciones de los extranjeros. De este modo las amenazas son las dificultades económicas familiares, las agresiones violentas de las personas que les rodea, etc. Será la fortaleza (fortificación de la persona) la que le ayude a defenderse y a reaccionar ante dichas amenazas. Cuando la amenaza es superior a la fortaleza, la batalla estará perdida, es por ello que deberemos de cargar de importancia a las fortalezas en detrimento de las amenazas, las cuales siempre estarán ahí, y difíciles son de modificar o atenuar.

OPORTUNIDADES

A veces, se dice que las oportunidades se encuentran o aparecen, aunque yo prefiero decir que las oportunidades se buscan, pues de ese modo se encontrarán mejor en la acción que en la pasión de la espera.

Las oportunidades suelen estar en algunas personas que nos rodean, pues no todo lo externo es malo, siguen existiendo las almas buenas, las personas de buen corazón. Ahí es donde debemos encontrar la oportunidad de seguir a flote ante las adversidades, encontrar esa persona que nos tiende la mano, que nos ayuda en los momentos difíciles. Este hecho puede parecer ajeno a nuestra voluntad, ya que depende la salvación de esa mano, pero también, en muchas ocasiones, la mano está tendida y no deseamos cogerla.

Alicia, es madre joven que quiso encontrar una salida a sus problemas familiares, un padre alcohólico y ludópata, una madre ausente y cuando aparecía era violentamente. Creyó conseguirlo en Jorge, con el que tuvo la primera hija... Ahora lejos de este maltratador se aferra a la segunda oportunidad, personalizada en Arturo un chico amable y simpático que es el padre de sus dos hijos mellizos.

Alicia trata de dejar a tras sus debilidades de nombre “cocaína y alcohol”, lucha por correr sin dejar que éstas la alcancen.

Ahora tiene una vida estable, su pareja Arturo, que además de padre de los mellizos, hace de padre de la hija mayor, a la que quiere con locura. Ella sabe que esta oportunidad no puede ser dejada a un lado, tiene que seguir con ella toda su vida.

Arturo trabaja duro para sacar a su familia adelante, tiene una gran fortaleza, sobre todo la voluntad del trabajo y de la lucha, nunca para, siempre está ideando cosas nuevas.

En muchas ocasiones el padre de su primera hija, Jorge la trata de localizar, y aunque ella no le coge el teléfono, el busca las rendijas familiares para tratar de llegar a ella, la amenaza ronda su vida una y otra vez, pero ella debe seguir siendo fuerte para proteger a sus hijas, para proteger a su familia, para proteger, de las amenazas, su vida.