jueves, 29 de noviembre de 2012

Eran dos tipos requetefinos...

Era un tipo requetefino, era una magnífica persona y un gran profesional de su oficio...PAYASO. Y digo era porque ha fallecido MILIKI (Emilio Aragón), ciertamente una noticia que nos ha chocado a tod@s l@s que fuimos niñ@s y gritamos BIEEEEENNNNN , después de que Miliki nos preguntara ¿Cómo están Ustedes?
Posiblemente no podríamos entender una infancia feliz lejos de la alegría y el humor, y detrás de la alegría siempre estaban los Payasos y los payasos de la tele significaron un elemento fundamental de nuestra infancia, como el colacao, la nocilla, mazinguer, comando G, parchís, etc. 
La gallina turuleca, ha puesto un huevo, ha puesto dos, ha puesto tres... y Susanita tiene un ratón, un ratón chiquitín, porque había una vez un circo que nos alegró el corazón y ahora ..., se nos llena los ojos de lágrimas recordando a nuestro amigo MILIKI, que siempre estará en nuestro jóven corazon...QUÉ DIOS LO TENGA EN SU GLORIA, gritando desde el cielo......... ¿CÓMO ESTÁN USTEDES?

martes, 20 de noviembre de 2012

II Encuentro de la Plataforma de Profesionales de Tratamiento Familiar de Andalucía



Este pasado sábado 17 de noviembre en la acogedora sede del Colegio Profesional de Educadoras y Educadores Sociales de Andalucía, y en la no menos acogedora ciudad de Córdoba tuvo lugar el II Encuentro de la Plataforma de Profesionales del Tratamiento Familiar de Andalucía, con la incorporación de la provincia de Málaga, a la cual pertenezco. 

Hasta la actualidad los encuentros han contado con Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva y Málaga. Ciertamente la Plataforma desde su nacimiento ha ido creciendo a buen ritmo, cada día somos más l@s profesionales que nos sumamos a un proyecto repleto de ilusiones y de ganas de luchar por el derecho de l@s profesionales que trabajamos con familias con menores en situación de riesgo.
Como bien se dice en el manifiesto presentado; la Plataforma de Profesionales de Tratamiento Familiar de Andalucía (PPTFA), conformada por l@s profesionales que trabajamos en el Programa de Tratamiento a Familias con menores (PTF), ante la evidencia de los cambios estructurales y económicos que se vienen produciendo en los últimos tiempos, se considera plenamente legitimada para proponer una serie de ajustes en orden a asegurar la continuidad del PTF desarrollado por la Junta de Andalucía, a fin de mantener y mejorar la actual garantía de calidad y eficiencia del mismo.
Esta claro que detrás de nuestras intenciones no existen unos intereses personales y egoístas de un colectivo profesional, sino un especial interés por el desempeño profesional cuyo objetivo prioritario será la adecuada atención profesional de las familias y sobre todo de las necesidades educativas, sociales y psicológicas de los menores que puedan estar en situación de riesgo de sufrir maltrato, tanto por sus propios padres, entorno social e institucional.
En este II Encuentro, celebrado en Córdoba, se ha afianzado muchas de las ideas surgidas tanto en el primer encuentro celebrado en Fuente de Piedra, como a lo largo de estos últimos ocho meses, donde las aportaciones de l@s profesionales de los ETF han ido configurando un interesante proyecto, que poco a poco se va materializando en el desarrollo de la Plataforma.
Decir que nos ha servido este II Encuentro para intercambiar ideas y experiencias diversas por parte de l@s distint@s profesionales de los ETF que al mismo asistimos, puesto que partimos de la heterogénea realidad provincial de una Comunidad Autónoma con ocho provincias muy diversas. Pero la bondad de estos encuentros se refleja en la habilidad que tenemos para crecer aprendiendo de lo heterogéneo, de las distintas experiencias de los Equipos de Tratamiento Familiar.
Y por último, decir que se agradece el ser bien recibido por un@s amig@s como han sido l@s profesionales de Córdoba, que como anfitriones se merecen todo nuestro respeto y admiración. Y, simplemente, siendo portavoz de mi mismo quisiera darles las gracias por l@s compañer@s de la Plataforma que nos han hecho sentir muy cómod@s a l@s malagueñ@s que allí estuvimos, que por primera vez nos hemos sumado a este ilusionante proyecto.
Parafraseando a Rick; “…creo que este es el principio de una gran amistad”.

Día Internacional de los Derechos de la Infancia



En 1959 la Asamblea General de las Organización de Naciones Unidas aprobó una Declaración de los Derechos del Niño, que en estos tiempos que corren, se hubiese debido denominar “del niño y de la niña”.
A partir de ahí, la ONU determinó que fuese el Fondo Internacional de Emergencia de las Naciones Unidas para los niños (UNICEF) el organismo encargado de la protección de l@s menores. Desde entonces se ha empleado a fondo para proteger jurídicamente a la infancia, y fruto de sus debates nació, el 20 de noviembre de 1989, la Convención sobre los Derechos del Niño. Es por ello que hoy se celebra el día Internacional de los Derechos del Niño y 23 años desde que se celebró la Convención de los Derechos del Niño. Tiempo que muchas voluntadas siguen empujando el mundo de los derechos de la infancia para conformar un mundo mejor para las niñas y niños de todo el mundo, un mundo que cada vez es más ingrato para l@s menores, un mundo que exprime a las personas, quedando la parte más débil, la infancia, a merced de los poderes opresores.
Desde un aspecto formal, la Declaración de los Derechos del Niño contiene diez artículos o preceptos que tratan de proteger jurídicamente a l@s menores. Por otra parte el espíritu de dicha Declaración, busca la protección de la infancia de cara a un desarrollo físico, mental, moral, espiritual y social, donde todas y todos sean iguales sin ninguna excepción en busca de un futuro lo más normalizado posible en unas condiciones de libertad, dignidad, felicidad y armonía.

Quizás sea porque ha pasado mucho tiempo desde el 1959, que en la mente del colectivo humano se esté diluyendo los derechos que entonces se establecieron, tal vez porque la velocidad de crucero que ha alcanzado la sociedad “neoliberal”, amparada por el desarrollo económico y porque no se tiene el suficiente sosiego y templanza para detenernos a contemplar como están creciendo nuestros niños y niñas, como se están desarrollando, con qué calidad y bienestar. Un bienestar que se está desmontando gracias a las políticas de ajuste, que se han decidido desde el poder económico y político.
En estos momentos de crisis social y económica, el número de menores en situación de riesgo de exclusión ha aumentado exponencialmente, l@s menores que cada día se alejan más y más de la educación y formación de la escuela, para ayudar a sus padres a encontrar recursos económicos para el sustento de las familias, crece y crece, sin que la Administración tenga recursos para evitarlo y combatirlo, puesto que las políticas sociales que antes se encargaban de ello están mermadas por los ajustes. De hecho los programas de absentismo de la Junta de Andalucía han menguado significativamente en los últimos 5 años. Las medidas de desamparo de l@s menores, que están siendo maltratados por sus familiares y su entorno social, se convierten en “muy difíciles de aplicar”, puesto que no existen medios materiales. Y aunque se convierte en preceptivo el trabajar en el medio familiar y social las conductas maltratantes para tratar de erradicarlas, las familias tienen prioridades más esenciales y básicas.
Bueno, no obstante, con crisis o sin crisis, la sociedad tiene que seguir tratando adecuadamente la infancia y evitando el maltrato de la misma a manos de la propia sociedad, y aunque suene a paradoja es ciertamente una cosa evidente de la que los poderes políticos y sociales no pueden huir.
Para finalizar, nuestro propósito ha de ser el de buscar una vida mejor para nuestras hijas e hijos, pues serán el futuro de nuestra sociedad, l@s que perpetúen un mundo mejor del que le estamos dejando.

jueves, 15 de noviembre de 2012

El inconformismo como un ejemplo vital



Cuando se es padre y madre, no solamente se asume la responsabilidad de dar protección, abrigo, alimentación y demás cuidados biológicos y físicos…, también adquirimos el rol educativo y la transmisión hacia nuestr@s hij@s, de nuestros propios valores éticos y morales, los que hemos aprendido de nuestros padres y madres, así como los que nuestro entorno social nos ha ofrecido. Esa alimentación moral es fundamental para formar y ayudar a crecer el espíritu de nuestra progenie.
Es una gran responsabilidad, si queremos que nuestras hijas e hijos crezcan sanos, felices y libres. Desde hace bastantes tiempo y a través de la historia, la familia ha contribuido a reproducir la estructura de dominación de unas clases por otras, de una generación a la siguiente.

La familia forma parte de los mecanismos de vinculación de la ideología dominante; es el primer contexto dentro del cual la niña o el niño empieza a asimilar los valores y normas de comportamiento dominante en la sociedad (Intervención con menores. Acción socioeducativa). Esto lo vemos en un problema social, cada vez más acuciante, como es el absentismo escolar. En dicha problemática influyen multitud de factores, pero uno de los decisivos es el poder que tiene la familia en la transmisión del valor que la escuela tiene para el futuro de nuestras hijas e hijos. En familias donde se ha forjado un desinterés o, incluso un odio hacia la “escuela” como norma de obligación y sometimiento, se educarán hijas e hijos que en un futuro formarán parte de la masa absentista del sistema escolar.
Por otra parte en el ejemplo de la lectura, también lo podemos ver, de padres y madres lectores de libros, nacerán hij@s con interés por la lectura, del campo del deporte podemos poner miles de ejemplos.
Aunque bien es cierto que de los ejemplos positivos, nos cuesta más hacernos eco, siempre predominan los ámbitos más negativos (absentismo, conflictividad, violencia, delincuencia, etc.)

Pero el tema del que me quiero ocupar en esta entrada de mi blog será de la implicación moral y ética en el ejercicio democrático de la reivindicación de los derechos, acción libre y proyectiva de unos valores relativos al inconformismo. Tal vez por que nuestra sociedad está aun muy verde en cuanto a los ejercicios democráticos, pues venimos de una relativamente cercana dictadura…, donde no se podía expresar ningún tipo de sentimiento, deseo o reivindicación ante algún tipo de agravio social.
En la actualidad, vivimos en un evidente “estado de derecho”, que nos ampara ante las posibles quejas, podemos alzar la voz, podemos protestar. Pero también podemos conformarnos, podemos gritar en silencio y podemos encerrarnos en nuestro inmovilismo.
Ahora bien, como en los ejemplos anteriores, las madres y padres somos modelos para nuestr@s hij@s, ell@s son un espejo en el que poder reflejar nuestras conductas, nuestras ideas y nuestra forma de comportarnos ante las diversas circunstancias vitales. Este pasado 14 de noviembre con motivo de la segunda Huelga General que tiene lugar en el año político del gobierno del partido popular, se ha hablado de participación y seguimiento de la misma, de la implicación de las trabajadoras y trabajadores. Hemos podido ver y oír en los medios de comunicación opiniones y ejemplos de todos los colores, tanto las madres y padres que secundaban la huelga junto con sus hij@s que no iban al colegio, como las madres y padres que estaban en contra de la misma y que consideraban una aberración proyectar sobre los niños y niñas el “absentismo” escolar.
Pues bien, yo no entro en valorar las opiniones de un@s y otr@s, aunque yo tengo muy claro mi posicionamiento. Yo valoro el acto en sí de transmitir a nuestr@s hij@s un modelo de educación democrática, donde lo verdaderamente importante es la transmisión de los valores relativos a la salud, la felicidad y sobre todo la libertad. Pero he visto, muy a mi pesar, como familias moderadamente “progresistas”, que en sus valores morales, ético, políticos y sociales prevalece las ideas de izquierda, que expresan sus padres y madres, los deseos de un cambio de rumbo en la política de recortes-reformas impuestas por el partido popular, como este miércoles 14 de noviembre asistían a su puesto de trabajo, con o sin explicación, con o sin motivos.
Después de mucho reflexionar, después de pensar como es posible, no encuentro la explicación, no el camino de los verdaderos motivos, lo que sí soy consciente es que al final lo que estamos haciendo es transmitiendo a nuestros hijos e hijas los valores del inmovilismo, del conformismo social, de que no importa de que nos impongan una restricción de nuestros derechos laborales y sociales, no importa que nos recorten el sueldo, no importa que nos aumenten la jornada laboral, no importa que se disminuya el número de médicos y de especialidades médicas en los hospitales, no importa que la atención en los centros educativos se vea menguada, etc.
En cierto modo estamos contribuyendo a dar como buena la idea de que la familia forma parte de los mecanismos de vinculación de la ideología dominante, que en este caso es la “neoliberal y de derechas” impuesta por un partido popular, donde, ésta es el primer contexto dentro del cual la niña o el niño empieza a asimilar los valores y normas de comportamiento dominante en la sociedad, que no deja de ser otro que el puro y duro “CONFORMISMO”. Quizás es lo que quieran los poderes políticos, económicos y religiosos, que la sociedad esté plagada de un inmovilismo borreguil, dúctil y maleable, al que poder manejar y dominar, para imponer los valores que imperan en el Capitalismo Neoliberal más salvaje.., “ora et labora”.

sábado, 3 de noviembre de 2012

Para que los ETF se hagan visibles a la luz social

Desde este sencillo espacio de la educación familiar, quisiera dar mi más sincera enhorabuena al Equipo de Tratamiento Familiar de Motril (Granada), por su labor y reconocimiento a nivel nacional de su trabajo con las familias de la localidad de la costa granadina. 
Recientemente, en el VIII Congreso Nacional de la Asociación Española de Psicología Clínica y Psicopatología y I Jornadas de Promoción del Bienestar Psicosocial en la Infancia y la Adolescencia, han tenido la oportunidad de exponer su trabajo con las familias con menores en riesgo.
Creo que es justo que la sociedad, tanto científica, como en general, empiece a reconocer una labor tan importante y delicada, al mismo tiempo, como es la que se viene realizando por los Equipos de Tratamiento Familiar de toda Andalucía, servicio especializado pionero en nuestra región, que tiene un importante carácter multidisciplinar, donde la tres visiones de la psicología, el trabajo social y la educación hacen una labor de acción y protección sobre la dinámica familiar, tratando de atenuar las situaciones de riesgo y maltrato que puedan recaer sobre los menores.
Nuestra alegría ha de ser doble, tanto por el éxito de los compañeros y compañeras de Motril, como por el reconocimiento social e institucional que ha de tener este servicio especializado de las corporaciones locales, que tiene el pleno apoyo de la Consejería de Salud y Bienestar Social de la Junta de Andalucía, la cual financia en un gran porcentaje. Y en estos tiempos que corren, con las dificultades presupuestarias impuestas por la situación de crisis global, se ha de considerar una verdadera línea roja infranqueable, el trabajo con familias con menores en Andalucía, por que los menores no tienen la culpa de la crisis, y así del mismo modo no se merecen sufrir los recortes impuestos desde las frías decisiones políticas, que nunca mirarán a los ojos de las personas.